Muchos son los atractivos que posee el territorio de Marbella. Un clima formidable y reconfortante, un paisaje atrayente y una naturaleza de una belleza natural desbordante; en definitiva un lugar idílico para vivir que ha provocado la llegada de miles de personas y turistas de todo el mundo, dispuestas a disfrutar de esta tierra que siempre fue generosa con sus gentes.
Históricamente la naturaleza de Marbella siempre ha sido determinante para el sustento de sus moradores. Al abrigo de la Sierra Blanca y a orillas del mediterráneo, proliferaban las mas variadas manifestaciones del bosque mediterráneo. Inmensos bosques de alcornoque, encinares, ecosistemas dunares de importancia, ríos y arroyos, sierras, montes de mediana altura y fértiles llanuras. Todo ello conformaba un mosaico de ecosistemas concentrados en un territorio relativamente pequeño y de gran biodiversidad. Toda esta naturaleza intacta y virgen comenzaría a ser humanizada con la llegada de las primeras civilizaciones que se adentraron en este territorio: fenicios, romanos, árabes… comenzaron a explotar las riquezas que contenían su mar, sus bosques e incluso los minerales que escondía el subsuelo… Poco a poco fue cambiando el paisaje y con ello la introducción de la agricultura, la ganadería y por consiguiente los asentamientos humanos. Esta serie de circunstancias fueron transformando el paisaje tal y como lo conocemos hoy día, siendo radicalmente distinto al originario, aunque no deja de ser interesante e importante desde el punto de vista natural.
Marbella siempre ha gozado de una posición privilegiada, geográficamente hablando, debido a su cercanía al estrecho de Gibraltar y por lo tanto cercana al lugar donde se unen dos continentes, Europa y África, ademas de la unión del Mediterráneo con el océano Atlántico. Esta circunstancia determina entre otras cosas que comparta algunos endemismos botánicos con el norte de África, ademas de parte del flujo migratorio de gran cantidad de especies de aves que pueden ser observadas durante su viaje hacia el continente africano. Así como numerosas aves marinas que entran y salen del Mediterráneo en sus viajes migratorios y que utilizan nuestras costas para la invernada. Sin duda uno de los lugares mas representativos y de mayor atractivo paisajistico es Sierra Blanca, macizo montañoso de belleza extraordinaria y de gran riqueza botánica y zoológica. En este enclave natural podemos encontrar plantas de interés botánico como la Bolina Moruna genista haensseleri, endemismo casi exclusivo de esta sierra; y el denominado Perejil Carnoso rupicapnos africana sub. Decipiens, este último un endemismo iberonorteafricano que se encuentra en peligro de extinción. Sierra Blanca cuenta con otras especies de interés tales como la Cabra Montes capra pyrenayca y especies de aves de la importancia de el Águila Perdicera hieraaetus fasciatus y la Collalba negra oenanthe leucura, pequeña ave que tiene una restringida área de distribución limitada al sureste peninsular y norte de África. Otros espacios naturales de interés son los restos de los antiguos alcornocales que poblaban la zona, denominados como «bosques isla» quedando algunos de ellos, tales como el alcornocal de Elviria, Los Manchones… etc. Las zonas húmedas están representadas principalmente por las desembocaduras de los ríos y pequeños embalses en los cuales se han observado especies de aves acuáticas como el Calamón común porphyrio porphyrio. Merece destacar también los ecosistemas dunares, que son probablemente los que mas han sufrido el acoso humano ya que el turismo ha asentado su industria principalmente en la franja costera, esquilmando prácticamente la zona de dunas; pese a ello siguen quedando algunos de estos espacios naturales que han escapado a la vorágine urbanística. Marbella posee una naturaleza sorprendente, llena de paisajes agradables, paisajes de mar… paisajes de montañas. Paisajes para conocer y descubrir.
Antonio Figueredo Navarrete
Secretario y socio fundador de Marbella Activa.
http://marbellaalnatural.blogspot.com
Una valoración muy acertada Juan, espero que cada vez seamos mas ciudadanos los que reivindiquemos y valoremos los espacios naturales de Marbella para nuestro disfrute personal y que a su vez contribuye a nuestra calidad de vida.
By: Antonio Figueredo NavarreteEstoy totalmente de acuerdo con Antonio y espero que poco a poco tanto los visitantes de Marbella como sus residentes se vayan dando cuenta de las inmensas oportunidades que esta ciudad nos ofrece para disfrutar de la naturaleza con una Sierra Blanca estupenda para pasear largas horas por parajes preciosos y solitarios y por caminos que unas personas amantes de la naturaleza, y a las que desde aquí quiero agradecer y felicitar, están recuperando para disfrute de todo el que quiera.
By: Juan Abrisketa