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Abr '15
22 abril, 2015
Nuevo relato con el que nos obsequia Jose María Sánchez para contarnos sobre la ciudad que no existe.
«A las 11 de la mañana Nicolás Tabaré ya está sentado en posición de loto sobre el empedrado frío de la calle del Carmen, desliza con maestría la yema de los dedos sobre la superficie metálica de su hang. Su mano izquierda, mientras, marca un ritmo fundido en bronce. El efecto es un sonido antiguo que parece bajar planeando por las laderas del Himalaya, una música armoniosa que pasa desapercibida para los viandantes tan cercanos, tan ausentes….»
Arturo, cuanto me alegro de haberte inspirado, y te agradezco tu comentario tan amable, un abrazo.
By: Jose MariaJosé María, mil gracias por volver a emocionarnos con tus maravillosos relatos. ¡¡Que bien te sienta tú Málaga, puñetero!! Como sabes estoy preparando el paseo por los espacios públicos del centro de Marbella con motivo de la celebración del Jane's Walk 2015 y tu relato me ha abierto las puertas al enfoque que le quiero dar pero que no encontraba. Gracias compañero.
By: ArturoQue va, era yo quien estaba deseando escribir algo aquí, ¡muchas gracias Antonio!
By: Jose mariaEn Marbella Activa estábamos espectantes por leer un nuevo relato de José Maria y nos has regalado este nuevo relato cargado de maestría literaria. Enhorabuena José Maria.
By: Antonio Figueredo NavarreteMuchas gracias por tu comentario, Ana María. A veces solo hay que hacer el esfuerzo de detenerse a no pensar, para ver esos colores invisibles. Pero tantas obligaciones, tanta carrera, tantos pensamientos inútiles nos impiden ver la ciudad mas bella, la que no existe.
By: Jose Maria